Zamba. Aprendí a bailar con el diablo. Desde su infancia, Teresa, « la Zamba», caminó por un sendero de dolor, marcado por el abuso y la injusticia. Sin embargo, su historia no es solo una crónica de sufrimiento, sino un testimonio de resistencia, fuerza y esperanza. Criada en un entorno donde la crueldad parecía ser la norma, Teresa aprendió a sobrevivir entre golpes, desprecio y un amor que nunca llegó. Pero en su corazón ardía la determinación de no ser vencida. A pesar de las sombras que la acompañaron por años, encontró maneras de mantenerse firme, de reclamar su lugar en el mundo, y de escribir su nombre, aunque fuera torcido, en la memoria de quienes la conocieron. Teresa vivió más de cien años , llevando consigo las marcas de un pasado que nunca se borró, pero también el coraje de una mujer que nunca se doblegó. Fue testigo de un mundo, en cambio, de generaciones que crecieron bajo su mirada, y de momentos que la hicieron reír y llorar. A lo largo de su larga v...